| PROCOL HARUM :
"Home" (1970) |
| Después de un álbum de tan altísimo
nivel como fue A Salty Dog , el alejamiento de Matthew Fisher, las nuevas
tendencias progresivas y las ya notorias tiranteces entre Brooker y Trower,
hicieron pensar que Procol Harum correría la misma suerte que Nice, Crazy
World of Arthur Brown o los Move, es decir muerte de la banda y renacimiento
con nuevas formaciones y /o nuevos rumbos musicales. No fue el caso, antes por el contrario. En 1970 seria editado el cuarta larga duración de Procol Harum: Home o lo que es igual, una banda en la cima de su vitalidad y por ende, creatividad. El álbum parte con el endiablado Whisky Train, un tema para levantar a un muerto, rock puro y duro en el cual la guitarra incansable de Robin Trower esta permanentemente provocada por el aplicado trabajo de B.J. Wilson. Es uno de esos temas que se recomienda escucharlos a un buen y alto volumen y un par de veces seguidas para apreciar su fuerza y la calidad interpretativa, es que además tiene la particularidad no aburrir. The Dead Man's Dream es una balada en la cual nos parece que Fisher todavía estuviera presente y es que quien le reemplaza, es ni mas ni menos que un antiguo compañero de Brooker y B.J. Wilson con quienes integraba a los pre-Procol, The Paramounts. En efecto Cris Cooping tenía el honor de encargarse del Hammond.....y ademas del bajo, pues este es el único álbum donde Procol Harum es un cuarteto más el letrista K. Reid. Es pertinente aquí decir algo sobre una diferencia entre Cooping y Fisher en relación al uso del Hammond. M. Fisher usa un timbre mas eclesial y docto, con menos vibrato; en tanto que Copping, generalmente, usa un sonido mas rockero. Still There'll be More , nuevamente puro rock , pero en envase de lujo. Nothing that I Dindn't Know, cuando una melodía tiene el curioso efecto de erizarte los pelos, los adjetivos sobran. Pero si ademas dicha melodía esta ejecutada con prolija delicadeza es que estamos frente a una autentica joyita. About to Die, una canción que la mezcla sonora de guitarra y Hammond da un especial trasfondo al lucimiento de Brooker en el piano, lamentablemente el tema es cortado prematuramente. Baryard Stories que abre la cara B del disco es una balada intimista donde salvo pequeños segmentos en el cual hay órgano, solo participa Gary Brooker con su voz y piano; es la calma que precede la tormenta musical que representan los dos temas que le siguen: Piggy Pig Pig, un tema ecléctico, a veces oscuro, intencionadamente poco definido y que finalmente se decide por terminar en un punteo condenado terminado con fade. El non plus ultra lo hallamos en el penúltimo surco: Whaling Stories, un viaje delirante en un barco de pesadilla y con un capitán desquiciado, el punteo espeso y corrosivo de Robin Trower nos lleva, o mas bien nos arrastra poco a poco al apoteosis en la cual con gran efecto de voces se culmina en una luminosa verdad. Todo ello, obviamente son los problemas personales de Keith Reid llevados magistralmente al pentagrama. por Gary Brooker. Uno de los mejores temas de la discográfica procolhariana y un clásico para la historia del rock. El vinilo nos despide, después del palizón anterior, con un tema de antología: Your Own Choice. Esta hermosa canción combina muchos de los recursos que hacen de Procol Harum una banda tan especial, con el agregado curioso que termina con una armónica, instrumento poco usual en ellos. El tema y el L.P. se aleja en fade en un ritmo y con una melodía que nos recuerda el ultimo tema del trabajo anterior, A salty Dog, el tema en cuestión: Pilgims Progress, que curiosamente es autoria de Mattew Fisher, quizá el subconsciente de grupo, quizá homenaje. En resumen, una joya esculpida por una de las bandas que con más propiedad puede llevar el titulo de : Institución. Imprescindible. Cogito Ergo Rock, Claudio. |
